Un compromiso...Salvando vidas!!

FUENTE EL NUEVO DIARIO 
 Es mi pasión dar a conocer nuestras comunidades y esto incluye sus recursos naturales, en interés de generar un mayor flujo de atención hacia las mismas. Un encuentro con cada una de ellas me permite ver sus virtudes y carencias, y es dentro de este contexto que traigo ante ustedes una cara no acostumbrada....la de la vulnerabilidad ante fenómenos naturales que pueden ocasionar desastres.

Todos sabemos que  estamos enfrentando el Cambio Climático, consecuencia del calentamiento global, producto de la emisión de gases de efecto invernadero producidos por el hombre, entre otros factores, elevando esto el riesgo sísmico, los tsunamis y eventos  hidrometeorológicos.

De  hecho República Dominicana, está catalogado como el  octavo país del mundo con mayor vulnerabilidad a los estragos del cambio climático, y a cada uno de nosotros nos toca hacer lo propio para mitigar los efectos.

Hicimos presencia un domingo reciente,  junto al grupo de periodistas que estamos siendo formados en temas de riesgos sísmicos, en el Diplomado “Comunicación en Riesgos de Desastres y Cambio Climático”, organizado por la PNUD y FLACSO en las comunidades del Gringo en Haina, Nigua y Palenque de la provincia de San Cristóbal, en la región sur del país, omunidades altamente vulnerables ante amenazas reales de contaminación y las antes mencionadas.

Constatar el grado de vulnerabilidad que enfrentan las mismas, específicamente la comunidad de Gringo en Haina nos entristece: la contaminación, su cercanía a la costa, refinerías, empresas de productos químicos,  por mencionar alguna, cañadas, aguas residuales, carencia de desagües, y para cerrar con broche de oro, tiene ante sí el riachuelo el Ñagá, hacia donde convergen todas las cañadas... definitivamente  es para tomar acciones.

No entiendo cómo siendo la Zona Industrial de Haina generadora de tantos recursos y conocedora de que al mismo tiempo es responsable de una contaminación insostenible para esas comunidades, no deciden hacer labor de responsabilidad social y mejorar el entorno de vida de los munícipes para incidir positivamente en lo más importante, que es la salud.

Viendo este escenario y constatando el olor a cloaca de las aguas negras del Ñagá y a acetona al mismo tiempo, producto de la permanencia de una empresa que elabora químicos de la otra, solo pude decir...Dios ¡¡, que triste es no tener quien defienda a las comunidades pobres, aunque sea en uno de los derechos inalienables del ser humano...la salud.

Y es por lo antes dicho que nos alegra ver cómo instituciones y ciudadanos preocupados generan acciones que puede mejorar este realidad, por lo menos en este caso  a defenderse ante posibles desastres y es precisamente esto lo que se está realizando a través de los proyectos “Acciones que Salvan Vidas” y “Acción Tsunami”, que desarrollan el PNUD, UNESCO y ACPP con el cofinanciamiento de la UE, en coordinación con los equipos de Prevención, Mitigación y Respuesta (PRM) de estos municipios, así como con las redes comunitarias de Gringo, el 18 y Bella Vista.

Con este programa las comunidades están aprendiendo a implementar planes de emergencia con rutas de evacuación, realizando censo poblacional y de necesidades especiales, desarrollando punto de encuentro, entre otros.

De manos de la Defensa Civil, la Cruz Roja y los bomberos se están capacitando a los encargados de alberques en torno a toda la logística que estos necesitan y a los comunitarios. De igual manera se está haciendo un levantamiento de personas minusválidas y envejecientes, esto a los fines de los albergues.

También se tiene previsto la realización de un mapa de múltiples riesgo y un simulacro en cada municipio, contando con el apoyo de las instituciones antes mencionadas, así como otros grupos comunitarios.

Comprobar el entusiasmo y agradecimiento que expresan los comunitarios por este proyecto nos alienta y es que estar preparados y bien informados hace la diferencia entre el número de víctimas a causa de desastres, y son muchos los efectos multiplicadores positivos que pueden desencadenar este tipo de proyectos, pues los fenómenos naturales están latentes y con las fallas tectónicas que tenemos en la isla, los desastres pueden sucederse.

Ojalá que las autoridades como el Ministerio de Medio Ambiente realicen una acción inmediata en torno al alto grado de contaminación a la que están sometidos estas comunidades, que están pidiendo a gritos ayuda responsable, donde tengan dolientes de parte del sector gubernamental, empresarial y también dentro de sus comunitarios. Es un asunto de todos!!